Un día como hoy, hace 186 años, falleció uno de los compositores más importantes de la historia de la música, Ludwig Van Beethoven. Hoy contaremos algunas historias curiosas acerca de este ilustre personaje:
¿Para Elisa?
La famosa bagatela para piano conocida por el nombre de "Para Elisa", no era para Elisa si no para Teresa. En el documento original del compositor aparece el título "Para Teresa" y se cree que la confusión se debe a un mal trabajo inicial de los copistas.
Misántropo
Su aversión hacia las personas era tal que llegó a decir "Prefiero mil veces a los árboles que a cualquier persona". Esta pasión por la naturaleza queda reflejada en su 6ª sinfonía 'La pastoral'.
No era sordo
Beethoven no nació sordo, comenzó a perder audición a los 25 años y su perdida fue progresiva. Se dice que no pudo esuchar su 9ª sinfonía y que cuando vió que los músicos pararon de tocar al terminarla pensó que algo había salido mal.
Miedo al matrimonio
Su gran amor fue Antoine von Birkenstock Brentano, a quien escribió la carta 'amada inmortal'. Abandonó la relación por miedo al matrimonio y sentido ético lo que le ocasionó ciertos conflictos emocionales. También estuvo enamorado de Giuletta Guicciardi, sus primas, las hermanas Josephine y de Therese de Brunswick, de quién hablaremos más adelante.
Superando sus miedos
Trató de casarse con su siguiente enamorada, Teresa Malfatti. Realizó la petición al padre de Teresa a través de su amigo Gleichenstein y recibió como contestación la siguiente observación de un tío de la propia interesada,“Beethoven es un hombre muy torpe de entendimiento, aunque puede ser el más grande de los genios”.
¿Loco? Juzguen ustedes
Solía ir por la calle con vestimentas viejas, despeinado y gritando las melodías que se le venían a la mente a plena voz, ya que no podía oírse bien, y anotándolas en su cuaderno.
A los nazis les gustaba Beethoven
En la segunda guerra mundial, los nazis utilizaban como código de transmisiones de guerra las famosas cuatro primeras notas de la 5ª sinfonía, 3 puntos y una raya, que en código morse significan: 'V' de Victoria.
La décima
Existe una décima sinfonía de Beethoven la cual no llegó a terminar debido a su muerte.
Muerte dolorosa
En una carta a un amigo, expresó su deseo de que, después de su muerte, sus restos fueran usados para determinar la causa de su enfermedad y evitar que otros padecieran su mismo sufrimiento. Padeció mala digestión, dolor abdominal crónico, cirrosis hepática, nefropatía, pancreatitis crónica, irritabilidad, depresión, así como otros síndromes sin etiología demostrada, tales como alteraciones gastrointestinales, bronquiales, articulares y oculares.
Ciertos estudios demuestran que se debe a una intoxicación contínua de plomo, seguramente ingerido con el agua, lo que pudo ocasionarle saturnismo(antiguamente el plomo era conocido como saturno), un envenenamiento de este elemento que le produjo todas esas dolencias.
Es posible que esta también sea la causa de su sordera, ya que se han dado casos.
Mi preferida
En cierta ocasión, en una 'reunión' se acercó a una joven artista llamada Theresa la cual, al percatarse de quién era se dispuso a mostrarle su talento tocando el piano. Beethoven, entusiasmado le pidió que tocase algo suyo, a lo que la chica contestó que lo sentía mucho, pero que, aunque le gustaba mucho su música, era muy difícil de tocar. Tiempo después, Beethoven compuso 'Fur Theresa' (Para Teresa), que popularmente nosotros conocemos como 'Para Elisa'.
Fur Theresa
Al impactar con el iceberg, éste rápidamente hizo una grieta que permitió el paso del agua. Esto hizo que se llenasen los compartimentos, los cuales se habían construido a menor altura para ahorrar, lo que produjo que se hundiese más rápidamente.
