Pero, ¿Cuál fué el motivo de su hundimiento? evidentemente, un barco no se rompe con tanta facilidad al chocar contra un iceberg. Las causas son diversas y nos centraremos en lo importante:
El Titanic fue una obra muy ambiciosa y por supuesto costosa. Se pretendía acabar cuanto antes para hacer el estreno por todo lo alto, con lo que se aceleró su construcción y se escatimó en los gastos en la medida de lo posible. Dicen que ese día había luna nueva y el capitán no pudo ver el iceberg. Investigaciones posteriores al descubrimiento de los restos del buque afirman otro motivo.
Para la época, el buque contaba contaba con la cubierta de acero inoxidable, cuando por aquel entonces muchos de los navíos españoles aún eran de madera. Sin embargo, el acero utilizado en el Titanic no fue una gran elección para la ruta que tenían prevista.
Sin entrar en formas alutrópicas de los metales y resumiendo, para entender esto, solo hay que saber que dependiendo a la temperatura a la que forjemos la aleación y la velocidad de enfriamiento de la misma obtenemos un material u otro con unas propiedades u otras. Bien, pues resulta que el material del Titanic tenía la propiedad de volverse más frágil conforme disminuye la temperatura, lo que no es un inconveniente según para que aplicaciones. Por lo tanto, cuando el buque atravesaba el océano Pacífico por debajo de 0ºC, era igual de seguro que un trozo de cristal esperando el menor impacto.
Al impactar con el iceberg, éste rápidamente hizo una grieta que permitió el paso del agua. Esto hizo que se llenasen los compartimentos, los cuales se habían construido a menor altura para ahorrar, lo que produjo que se hundiese más rápidamente.
Animación del hundimiento por National Geographic